El óxido de Silano es una clase de organosilanos, que se utilizan ampliamente como agentes de acoplamiento en diversas industrias. Pueden mejorar la adherencia y durabilidad del material y mejorar sus propiedades mecánicas y eléctricas. En la industria de la construcción, el óxido de Silano se utiliza generalmente como aditivo para hormigón y mortero para mejorar su resistencia y durabilidad. En la industria electrónica, se utilizan como adhesivos para componentes electrónicos y materiales de encapsulamiento y encapsulamiento.
Además, el óxido de Silano se puede utilizar en recubrimientos y adhesivos para mejorar su adherencia, resistencia al agua y resistencia a la corrosión. Pueden aplicarse a diversos sustratos, incluidos metales, vidrio, cerámica y plásticos. El óxido de Silano también se utiliza como agente de enlace cruzado en la producción de resina epoxi, que se utiliza ampliamente en diversas aplicaciones, como materiales compuestos, recubrimientos y adhesivos.
En general, las características multifuncionales del óxido de silicio lo convierten en un componente valioso en diversas industrias, desde la construcción, la electrónica hasta la automoción y la aeroespacial.