Agricultura

Debido a muchas de sus características beneficiosas, el silicio orgánico se ha convertido en un sinergista esencial en la producción agrícola. El uso combinado con los pesticidas correspondientes puede mejorar significativamente la utilización de los pesticidas, controlando así las plagas y preveniendo enfermedades de manera más efectiva. Una de las ventajas más destacadas del silicio orgánico es que puede reducir la tensión superficial y, por lo tanto, tener propiedades de difusión y extensión más fuertes. Esto permite cubrir mejor las áreas objetivo y hacer que los pesticidas penetren más eficazmente en las plantas o plagas. Además, la silicona tiene una excelente adherencia y penetración, lo que significa que puede adherirse a la zona objetivo y penetrar más fácilmente. Esto es particularmente importante cuando la superficie de las plantas o plagas es difícil de humedecer o penetrar. La silicona también tiene una excelente resistencia a la temperatura y puede soportar condiciones ambientales adversas como altas temperaturas extremas o frío. También es resistente a la erosión por la lluvia y es un aditivo ideal para la agricultura al aire libre. Además, la silicona se puede combinar con la gran mayoría de bactericidas, pesticidas, herbicidas, reguladores del crecimiento vegetal y fertilizantes foliares en el mercado. Esta versatilidad la convierte en un componente importante de muchos tipos diferentes de aplicaciones agrícolas. Además, la superficie de silicona tiene una función de expansión súper fuerte, lo que hace que la cobertura del medicamento sea más amplia y uniforme. Esto significa que los medicamentos absorben o penetran más en la superficie de las hojas y los insectos, lo que produce un efecto de control más significativo. Al utilizar el silicio orgánico como aditivo en la producción agrícola, los agricultores pueden reducir la frecuencia y el costo de los medicamentos. En promedio, el silicona puede ahorrar hasta un 30% de los medicamentos y hasta un 50% del consumo de agua. Esto no solo ahorra dinero, sino que también ayuda a reducir el impacto ambiental de la agricultura. En general, el silicio orgánico es una herramienta importante para la producción agrícola moderna. Muchas de sus características beneficiosas lo convierten en un potente potenciador de una variedad de pesticidas, ayudando a mejorar su efectividad y reducir costos.